Capítulo 6 ¿Casualidad?

Al día siguiente cuando vine del colegio, llamé a mi hermano para que viniera a mi habitación y me contara lo ocurrido, y esto fue lo que me dijo:

-Entré en clase, y todos empezaron a reirse y a burlarse, no les eche ni la minima cuenta, porque como decía en libro, "nada duele más que el guantazo de la ignorancia".Cuando tocó el timbre me dirijí hacia el recreo y me senté en un banco, solo, pero me senté.Hasta que vinieron los de mi clase y me rodearon, no sabia que hacer, solo mantuve la postura y esperaba a que me dijeran la minima palabra.

-¡¿Pero al final te dijeron algo?!-Le interrumpí impaciente.

-Si, si, pero eso es lo que venia ahora.Cojieron y me dijeron que si tenia valor de decirle a la profesora que me estaban a cosando, me pegarian a la salida, y cojí y les dije:"Cuando tu consigas tener la mitad de virtudes que yo, entonces me buscas ¿vale?, porque paso de hablar con animales como tú que solo saben decir tonterias y estupideces". y una vez que terminé de decir eso, me fui.No por miedo, sino por dejarle con la palabra en la boca.

-¡Hiciste bien!.Esperemos que ahora no te vuelvan a molestar, sino voy a tener que enfretarme a ellos.-dije con rabia.

Necesitaba pensar.Pasear tal vez.Decidir que mejor seria dar una vuelta, habia tantas cosas que ahora mismo no cuadraban en mi cabeza y debia de poner orden,pensar en todo las cosas que me han venido de pronto y que ni siquiera yo mismo, puedo llevarlo todo.

Tantas cosas nuevas y todas a la vez.Casa nueva, no tengo amigos, mi hermano es gay y no lo aceptan en el colegio,Clara,Clara y mas Clara, y tenia que averiguar el porqué de ese simbolo nazi que aun me estaba comiendo más la cabeza.

Una vez que terminé de dar mi paseo y aclarar mis ideas, me dirijí hacia casa, pero antes fui a la papeleria que estaba al revolver de la casa de mi vecina de la esquina, si esa que me mira mal cada vez que voy a tirar la basura.

Entre en la papeleria a comprar unos cuantos folios para un trabajo que tenia hacer de presentación, y por desgracia me tuve que encontrar a Claudia en ese mismo momento.

-Hola Carlos, ¿que haces tu por aqui?-me dijo extrañada.

-Hola, pues que vengo a por folios para el trabajo que han mandado hoy para presentarnos.-Dije todo veloz, para salir del paso.

-A vale, pues bueno ya nos vemos mañana.

-Si si, adios..

El corazón me latia a mil por hora, no sabia si era por verla, porque me habia hablado o por si la tenia a dos pasos de mi.Solo sé que nada más me dio el vendedor los folios salí pitando de la tienda, antes de que me desmayara de tanto sofocón.

Al dia hablé con ella y le pregunté que, que hacia en el tienda, ya que me extrañó el no verle comprando nada.

-Pues es que mi padre es el vendedor, y yo muchas tardes le ayudo.- me respondió claramente.

Me quedé sin palabras.No podia ser verdad. Todo esto no me podia estar pasando a mi, y para aclarar todas las dudas que tenia sobre este tema le pregunte otra vez más:

-Y la casa que esta al revolver ¿de quien es?, es que te vi entrar por casualidad el otro dia.-pregunté con cierto apuro.

-¡Ah! es la casa de mi abuela, y la visito casi todas las tardes, ya que mi padre trabaja al lado.

Acto seguido, tocó la campana de las tres, y me fui a mi casa en un abrir y cerrar de ojos. Esto ya si que era el colmo, la chica que me molaba pasa por al lado de mi casa casi todos los días, tiene un símbolo nazi colgado del tobillo, y se sabia mi nombre de antes de yo llegar al colegio, puesto que aunque ella me dijera que se lo sabia porque me se habia caido una hoja en el pasillo cuando nos chocamos, recuerdo perfectamente que no se me cayó ninguna hoja, ya que yo llevaba una libreta.

Todo era demasiado extraño. Queria saber que estaba pasado, pero a la vez no le daba importancia, no sé si por miedo o por pura ignorancia. Pero me estaba destruyendo por dentro, eso si que lo tenia claro.

Bajé las escaleras y fui a merendar, tenia el estomago vacio. Y cuando iba hacia mi habitanción en el piso de arriba, me fijo en el cuandro de la escalera que tenia a mano derecha, arriba del barandal, veo que el la esquina, en el marco, tiene como rayado con una llave el símbolo nazi.Me pararizé.No sabia si llorar, preguntarle a mi madre que, que significaba eso, si no darle importancia o si averiguarlo por mi mismo, que creo que al fin y al cabo era lo que iba a terminar haciendo.